sábado, 26 de abril de 2014

Paseito por la Fueva.

Hoy me he decantado por ver dos joyitas del valle de la Fueva en la Cabezonada.
Primero voy a ver la ermita de la Virgen de la Isuala, que se ve tal que así desde donde dejo el vehículo:
 Junto a la ermita está la casa del ermitaño.
De la Cabezonada hay que seguir la carretera en dirección noroeste hasta las últimas casas, ya a pie se toma una pista descendente en dirección norte hacia el barranco. En frente nuestro veremos una bonita y típica cabaña de pastor.
Bajo hacia el barranco entre un paisaje impresionante.
La ermita está sobre un pequeño cerro que nos queda a la derecha del barranco principal, no existe camino y hay que subir campo a través. Primero encuentro la casa del ermitaño, sus dos plantas tienen entradas propias, la baja se cubre con bóveda de cañón.
La planta superior está muy destruida.

 Al lado se halla la ermita, erigida en el siglo XVIII, tiene derrumbada la mitad de su cubierta.




En la bóveda se conservan ciertas pinturas.


Desde aquí camino monte abajo en dirección sureste hasta el borde del barranco que alimenta el molino al que me dirijo.
No hay camino de la ermita al molino, pero no tiene pérdida, la misma orografía nos aboca a su único acceso desde el cerro. Desde el pueblo existe una pista hasta el molino que sale a la derecha de la que yo tomé para ir a la ermita.
Desde arriba ya lo veo con su techo cubierto por un toldo colocado ya en el 2012.

Aquí vemos la boca del cárcavo.

En la puerta se halla grabado: Año 1920, Molino Harinero.
Sin embargo varios grafitis junto a la puerta revelan que es mucho más antiguo, indicando fechas del mil ochocientos.
Conserva intacta su maquinaria, aunque bajo un precario techo que ha sido apuntalado.
Hay un par de bancos en uno de los lados, en el otro aparecen varios troncos apilados.
Puntal en la viga.
La tolva, el guardapolvo, las muelas...


Ahora veremos el cárcavo cuya peculiaridad consiste en su forma triangular.

Un sistema de travesaños permite el movimiento del saetín sobre el rodezno.
El rodezno es casi entero de madera, aunque muy deteriorado ya y cubierto de tosca como el resto del cárcavo.
El molino se alimentaba por un inusual  canal abierto construido en madera.

Si subimos barranco arriba caminaremos por una senda que no es otra cosa que la antigua acequia colmada. Quedan restos de una tajadera para desviar el agua cuando no se molía, cerca del edificio había un segundo aliviadero que oculta la vegetación.
Y así llegamos donde estaba la balsa de captación, un lugar de gran belleza donde sólo se escucha el arrullo del agua.


He grabado tres videos del molino y de su entorno, en éllos puede comprobarse la belleza de este paraje y su gran valor patrimonial y natural.

 Por el arroyo en dirección al molino.
Sala de la molienda.
Excursión muy recomendable, el entorno es precioso y molino y ermita sendas muestras de nuestro patrimonio que igual que hoy están, mañana desaparecen... Se han restaurado molinos en el valle de la Fueva afortunadamente, a este ya le toca o lo perderemos para siempre.

3 comentarios:

KALMA dijo...

Hola! Unas fotos fantásticas y ya te digo que porque no me pilla cerca, tiene todos los alicientes que no gustan en un paisaje sin duda privilegiado. Un beso.

chis dijo...

Le tengo un cariño especial al Sobrarbe y en esta entrada se reconoce su aislamiento y abandono, pese a lo cual mantiene su belleza.
Esas pinturas de la iglesia las conocía por estar reproducidas en un pasa páginas de Sobrarbe-Aure (el territorio histórico que confronta con Sobrarbe al otro lado del Pirineo). Asi que a alguien le debieron parecer significativas de " la cultura de os pirineos centrales".
Te envidio tus correrías por lugares recónditos. Gracias por compartirlas

Rubén Oliver dijo...

Chis: Yo desconozco la comarca, pero de mi interés por élla nació la excursión que describo. Desde luego que lo que vi ya me impresionó bastante y pienso ir más a menudo.
Hallé unos niños preadolescentes por el camino...
-Hola- me dicen...
-Hola- contesto.
- ¿Eres de la Fueva?. (Tuteo impensable en mi época).
- No, vengo de Lleida, a hacer una excursión.
- ¡Hala!...La Fueva es bonita,¿a que sí?.
- Sí hijo, sí, muy bonita.
Jolín...casi que
me enternecieron.
Gracias por tu comentario.
Un abrazo.